El equilibrio
El equilibrio es un elemento esencial para la toma de conciencia corporal, pues sería imposible para el ser humano realizar cualquier acción de movimiento, orientado y preciso, si no existiera el control permanente y automático de la equilibración corporal.
Hay una serie de autores que consideran el equilibrio como una capacitación perceptivo-motriz inherente e indisociable a cualquier conducta motriz y que es observable, por lo que la consideran la primera capacidad tangible.
La presencia efectiva del niño en el mundo depende en primera instancia del tono muscular y del equilibrio. Es por ello, que debamos considerar la actitud equilibradora como parte integrante de la manifestación postural, así como estar presente en el resto de las habilidades motrices, ya que los sistemas responsables de organizar y sustentar el equilibrio son estimulados de forma constante en todas las actividades físicas.
Sin embargo, cuando estamos hablando de equilibrio, nos debemos acercar a la idea de reequilibrio, ya que es un desequilibrio permanente pero constantemente compensado. De esta manera a cada movimiento que realizamos con nuestro cuerpo, o una parte de él, le corresponde otro que compensa al anterior para conservar la estabilidad.